Usted es alemán, francés o de Madrid. Y quiere hacer el Camino de Santiago por una de las rutas tradicionales, por ejemplo el Camino de la Costa como los marineros franceses que llegaban hasta Avilés en la Edad Media, caminaban hasta Oviedo (ya se sabe: quien va a Santiago y no llega a San Salvador, visita al criado y olvida al Señor) y seguían ruta hasta el campo de las estrellas gallego.
Bueno, pues en medio de ese camino, cansado y sediento se encuentra en la avenida de Cervantes con el siguiente cartel: intuye por donde debe seguir su ruta, pero eso de agospiu suena un poco mal, ¿qué le harán? Para ser un albergue podian ponerle, como mínimo, una indicación bilingüe. No todos los visitantes tienen que conocer el asturiano. Tal vez sea por imitación, pero a mí con estas cosas como que hacemos un poco el ridículo.