martes, 20 de marzo de 2007

Un día mundial

De todos los días mundiales que se celebran, y mira que se celebran, hoy toca el Día Mundial de La Libertad de Expresión. No me suena que haya muchos actos en España. Uno de los pocos se celebra en Barcelona, con una lectura en homenaje a la periodista Anna Politkòvskaia, asesinada por denunciar la barbarie de Rusia en Chechenia, y a la poeta y traductora Yael Langella, fallecida hace dos meses en un accidente de tráfico y que acercó las denuncias de Politkòvskaia a estos lares.
No deja de ser sintomático en este país. A lo sucedido con Tele Asturias, se une el episodio Quintero de Televisión España. El director del ente argumenta libertad de empresa. Es decir, el derecho de cualquier medio de comunicación de decidir qué incluye en su oferta y qué no. Pero, en este caso,se llega a un terreno pantanoso. Ya que se trataba de una entrevista ya grabada y ampliamente publicitada. Se pueden decir muchas cosas, pero en este país quien tenga una cierta edad, y los que mandan la tienen, y desconozca cómo es José María García y Jesús Quintero es todo menos una persona capacitada para ejercer el mando en un medio de comunicación. García siempre ha sido polémico y siempre ha dicho lo que pensaba, gustase o no. Lo que no puede ser es aplaudirlo cuando se pone a favor del gobierno y pide el voto afirmativo para la Otan (hay quien piensa que el PSOE le debe la victoria por ese programa) y cuando critica a nuestros amigos o gente muy poderosa censurarle. Porque, por mucha libertad de empresa que argumente el director del ente, lo que hizo fue una censura previa escandalosa y vulgar.
Por lo menos tienen la decencia de no celebrar el día mundial de la Libertad de Expresión.

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