lunes, 23 de marzo de 2020

30 de febrero


Photo by Emiliana Hall on Unsplash


30 DE FEBRERO

Sin contar las misteriosas desapariciones ocasionales del
29 de febrero
cada año nos roban
un día de amor.

Cuando era joven no importaba,
incluso sin él
había bastantes sábados y miércoles.

Pero hoy para mí es importante cada día
en el que puedo mirarte.

 Nuestro feudo
que se extendía en los cincuenta años del futuro
se ha reducido a una pequeña granja

(1976)
Seix Barral, Barcelona, 2017

DUC (y IX). Hoy, pan doble

Photo by Victoria Shes on Unsplash


Soy biznieto de panaderas, nieto de panaderas y mi madre también trabajó en un despacho de pan del Chato, en plaza. Durante muchos años, había una expresión especialmente feliz para mi familia: "Hoy toca pan doble". Se ponía el anuncio en el puesto y cuando un cliente se llevaba su habitual barra pequeña se le recordaba: "Hay pan doble". Y mantenía su pedido o reclamaba más. 
Pan doble era la víspera de un festivo, de un encuentro familiar. Y, en la tienda, se advertía porque, al día siguiente el puesto estaría cerrado. Pan doble tocaba en las Navidades, en Semana Santa (Viernes Santo y antes del Domingo de Pascua) y los domingos. Conseguir el pan doble para los domingos no fue sencillo y obligó a muchas luchas.
Cuando las primeras tiendas comenzaron a vender pan los domingos, mi tía Berta nunca comía el pan del día. Siempre pedía el pan del sábado, aunque estuviese más duro. "Nos costó mucho descansar los domingos para comer hoy pan del día", nos explicaba cuando le ofrecíamos el pan del día. No recuerdo si en algún momento claudicó, aunque lo dudo, era todo un carácter.
Todo esto viene a cuento porque ayer tocó pan doble. Se había acabado y tocaba salir. Aunque sólo necesitábamos una barra, llevé dos. Toca pan doble, por nosotros, para seguir luchando, para vencer al virus.
Ya lo saben: toca pan doble y aplaudir a las ocho.

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails