Desconocía totalmente a la ovetense Teresa Soto hasta que leí Un poemario, libro con el que ganó en 2007 el premio Adonais. Es un libro que respira realidad. En ella, la poeta busca y encuentra la belleza de la cotidianeidad. Vemos la vida con otros ojos, con una mirada limpia y que descubre toda la poesía que va en ese arco infinito que empieza con el olor del primer café y termina con el ruido de los basureros haciendo su ronda. Un libro sencillo y lleno de vida, una experiencia gozosa de una autora que hay que seguir con interés.
No hay comentarios:
Publicar un comentario