Ya conocemos la pasarela peatonal que unirá el casco histórico con el Centro Cultural Internacional Óscar Niemeyer. Un proyecto atrevido y original. Lo que más me gusta es el valor que han tenido los políticos para asumir una propuesta de este tipo, cuando lo fácil hubiese ido a una respuesta más convencional, menos rupturista. Una rampa normal en zig-zag, con un impacto visual descomunal. Sin embargo, aquí se optó por alentar el talento y se ha logrado una de esas respuestas que luego ilustran revistas de arquitectura. Una reinterpretación radical de la antigua plaza del Pescado. Mis recuerdos de niño en la plaza del Pescado me muestran un edificio oscuro, un poco tétrico; ahora lo veré de una forma diferente, lleno de color y de luz.
Todo indica que la pasarela convivirá con Avilés durante muchos años, durante toda una vida.
Poco a poco, el proyecto avanza y la transformación urbana comienza a ser más visible.
Me parece una inmensa chapuza.
ResponderEliminarEsta pasarela nos dejará en el margen del paseo de la ría del lado de la ciudad, es decir que solo sirve para salvar la carretera y las vías dejándonos donde podemos llegar por el paso a nivel de Larrañaga...¿Y desde allí como llegamos al Niemeyer?.
No había leído mucho sobre el tema pero siempre creí en una solución para cruzar la ría.
Además decapita a la plaza del pescado y todo ello por solo...3,4 millones de euros... por cierto lo mismo que costará según hoy en el mismo periódico el centro de salud de Villalegre.
Estoy contigo Pedro. Pero míralo desde otra perspectiva..... ¿no será qué quieren hacer un homenaje a los avilesinos fallecidos en los 70 en el accidente de ENSIDESA? Por que tal parece que una viga de aquellas voladoras que cayeron en Llaranes y alrededores, se posó encima de la Pescadería......
ResponderEliminarEsta idea es influencia de Colero que siempre le busca el significado a todo..... que conste.
:-)
Me parece una grapa y no me disgusta. Lo de la plaza del pescado me parece que va a transformar todo el entorno, que lo necesitaba.
ResponderEliminarEstoy con Pedro, "para variar", el concepto de la grapa está bonito, que se escogiera la zona de la plaza del pescado como centro de recepción me parece muy buena idea... ¿pero quedarnos a medio camino? no sé si es una cuestión de diseño o hay alguna otra razón de peso, pero desde ese desconocimiento, parece pelín absurdo que la pasarela no cruce la ría. Quizás sea una cuestión económica de reducir costos aprovechando el puente arco iris o por cuestión técnica que exigiese intervenir en exceso en la zona de la ría que, supongo, es algo a intentar evitar para no conmocionar demasiado las vías durante la construcción. Algún dato se nos escapa a los legos, estoy convencida.
ResponderEliminarPedro: bienvenido del viaje, te veo con energías renovadas. No creo que yo llegue a ver las vías eliminadas y mis planes son llegar a centenario... No estoy de acuerdo con tu adjetivo. Me quedo con arriesgado, audaz, sorprendente. O quedará muy bien o muy mal, pero apuesto por lo primero.
ResponderEliminarAlicia: sé más positiva, que las lesiones curan más rápido.
Manuel: no me gusta el adjetivo de grapa y creo que deberíamos subrayar la dimensión alegórica.
Annie: formulas una buena pregunta, aunque igual es un problema técnico: al ser más larga igual había que apoyarla más... Y si cruzas la ría, ¿hasta donde? ¿al otro margen del paseo o el Niemeyer? Pero tienes la arteria del puerto...