Y yo que pensaba que Archipiélago tenía poder de convocatoria... Nada, al final cuatro amigos, y contando de forma generosa, en la presentación del Elogio del proxeneta, el nuevo libro de Luis Miguel Rabanal. Espero que, por lo menos, la insistencia en recomendar su lectura se traduzca en visitas a la librería.
Para fastidio de los muchos que no fueron, afirmo que os perdisteis una de las mejores presentaciones a las que he ido. No por mí, que hablé poco y bien, sino por María Jesús Romero, que realizó un análisis perfecto del libro, señalando todas sus posibilidades de lectura, y por Leopoldo Sánchez Torre, que nos recordó la importancia de Labios de locura, el libro que un jurado integrado por Antonio Gamoneda, Joan Brossa y Luis Rosales, premió con un Ana del Valle en 1983, y como desde entonces Luis Miguel Rabanal ha construido una obra poética intensa y de una fuerza singular.
Y ahora, que nadie llore. Todo el mundo se encontraba avisado.
Desde luego actos como el de ayer son irrepeteibles, nunca se lee igual un libro después de haber asistido a su presentación, sobre todo si es tan interesante como la del "Elogio del proxeneta".
ResponderEliminarUn abrazo
Lo siento mucho, Fernando.
ResponderEliminarDe vez en cuando no está de más tirar de sms. Pero lo de ayer se me olvidó totalmente. No suelo dejar solos a los de León.
Malos tiempos para la lírica, Fernando. La poesía no vende y, por tanto, tiene poco poder de convocatoria.
ResponderEliminarEsperanza: tienes razón. Además, tanto Leo como María Jesús hicieron cirugía fina, sin que el libro perdiese encanto para el lector y, además, nos enseñaron a leer mejor.
ResponderEliminarTheo: lo tuyo fue como Madama Buterfly: solo, perduto y abandonato. Menos mal que Luis estaba con Escarlatina, tanto viaje a Guaxintong y tanto jet-gang que es lo que pasa.
Velda: ¡¡Pero si era prosa!!, en fin, sea lo que sea tienes razón y no se vende.
La presentación de la obra maestra en cuestión fue un éxito.
ResponderEliminarMis enhorabuenas a los tres reponsables, que para nada son gratuitas.
Es una tragedia que tan alta literatura pase bajo el umbral de percepción, siquiera minoritario.
En fin.
Saludos.
Bueno Leo, por lo menos el libro está en las librerías y personas como TheoSarapo pueden comprarlo.
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