Me cuesta olvidar la última entrevista de Monseñor Setién en El País. Hiela la sangre. La falta de comprensión y amor hacia las víctimas del terrorismo, el analfabetismo histórico y las palabras medidas sobre quienes, en un sistema democrático como el nuestro, utilizan la violencia y el asesinato como eje fundamental de su discurso político indican que esa persona debería reflexionar sobre si su papel como representante de Cristo es el más acertado.
Si quiere hacer política, que la haga; pero debe colgar la sotana. No es acertado mezclar los responsables políticos con los ministros espirituales, aunque los valores personales siempre influirán en la res pública.
¿Hoy no debería tocar un texto sobre el curriculum del cuñado de Rajoy?
ResponderEliminar¿Cuántos de éstos estaremos pagando?
Lo de algunos mandamases de la iglesia deja bien claro que religión, fe e Iglesia no son lo mismo, por suerte.
Un columnista denostado por la progresía y la izquierda de salón ya dejó muy claro hace tiempo lo que es este sujeto.
ResponderEliminarDe una entrevista a Alfonso Ussía:
P:¿Por qué no le dejaban entrar en la COPE?
R:A mí me echaron de la COPE porque hice unos versos del que era Obispo de San Sebastián, Monseñor Setién: “En el portal de Belén nadie toca la zambomba porque un hijo de Setién ha colocado una bomba…".
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Me gustaría que mañana Garralda publicase en un diario una de sus extensas cartas al director llamando amigo de los terroristas al obispo Setién.
Uff, Annie. La fe católica e Iglesia están más unidas de lo que parece, de ahí que duela tanto cuando se comprueba la sencilla humanidad de sus ministros.
ResponderEliminarChema, bienvenido. Creía que habías cogido gusto a la sauna donde trabajas y ya te habías olvidado de este archipiélago.
Hay ciertos personajes de los que es mejor no comentar nada, y Setién es uno de esos.
ResponderEliminarSetién tiene la misma credibilidad moral que Javier Sardá, y la misma gracia, es decir, ninguna.
Ahi te apoyo brevers.
ResponderEliminarBrevers, tienes razón y por ese motivo tardé una semana en escribir. Días en los que me decía mejor no decir nada, pasa que son tonterías. Pero a veces el silencio es una forma de cobardía y hay que decir lo que uno piensa. Aunque sólo sea para quedar más tranquilo.
ResponderEliminarTocayo, lo de "mejor no comentar nada" no iba por ti, si no por los medios de comunicación, que son los que colocan a "esta gente" las herramientas necesarias para seguir "desvariando".
ResponderEliminarUn ejemplo lo del tipo este del metro y la chica ecuatoriana, el menda en vez de ser "castigado" socialmente es premiado cobrando por dar exclusivas, ya verás cuanto tardan en aparecer imitadores, ...
Este, tu blog, es un entorno ideal para comentar, criticar, defender y exponer lo que queramos con total libertad y respeto.
Faltaría más.