Si no llega a ser por el comentario de Félix Madero, uno nunca se hubiese fijado en la imagen que ilustra este apunte y que demuestra la fascinación mundial generada por Barack Obama. Así está Cristina Fernández de Kirchner apunto de levitar o de empezar a gritar: "Coméme, Obama, coméme". Y qué me dicen de Angela Merkel: jerr, ya te pillaré más tarde. Y José Luis, ahh, José Luis: "Cuando se lo diga a Pepiño, no me creerá. Si es como yo, pero en negro". O a Felipe Calderón, al que le debieron quitar la baba con el fotochop que da para mucho, como demostraré dentro de poco.
Stephen Harper, el primer ministro de Canadá, de medio lado de Merkel, parece el más inmune. Tal vez por eso de ser el primero en recibirlo. Puede presumir ante los demás de tener la primera foto. Y eso, desde luego marca.
¿Qué significarán esas sonrisas de la última fila? El último por la derecha es Robert Zoellick y, a su lado, Mario Draghi, sonriendo en plan picaruelos. ¿Por Cristina, por el culito de Obama o el de Michell que, según dicen, se las trae? Yo me quedo con la Kirchner: coméme, Obama, coméme.
Foto: Agencia Efe publicada en La Voz de Avilés-El Comercio
Obama ha despertado demasiadas esperanzas,que creo que comienzan a verse defraudadas. La crisis sigue a su ritmo, todos (directa o indirectamente) jodidos, y Obama que no lo soluciona. Han sido muchos los que han queda como auténticos papanatas por la devoción con la que recibieron al que pensaban que iba a ser el ZP de los USA. Los USA siguen siendo los USA, la crisis es la crisis, y Obama es Obama y ZP es ZP. La diferencia de Obama y sus seguidores con ZP y los suyos es que los primeros aman a su pais, y los seguidores de ZP detestan al suyo, cualquier cosa es siempre mejor que esto que se llama España. Papanatas, muchos artistas, académicos, políticos han caído en el papanatismo obamista (entre ellos la avilesina autora del blog nubes negras), yo les preguntaría a todos estos ¿y ahora qué?
ResponderEliminarAhora toca rezar y mucho.
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