En uno de sus comentarios, Chema ha expresado la rabia y el dolor que produce el último atentado de ETA. Isaías Carrasco, 42 años, con su familia a escasos metros, en su domicilio, escuchando los disparos y sufriendo el dolor de estos días, el dolor de las declaraciones y las palabras vanas, el dolor que producirá, dentro de quince días, las pintadas jaleando a los violentos y el saber que, en su pueblo, habrá quien les señale con el dedo cuando su sacrificio debería ser reconocido como un acto de heroísmo. Defendió la política y las libertades frente a la violencia, pagando, incluso con su vida.
Como tantos otros, levanto mi modesta voz para decirles a los asesinos que han podido con Isaías, igual que antes mataron a Fernando, o a Enrique, o tantos otros. Pero que nosotros, los demócratas, somos más y más valientes. Y, por eso, mañana iremos a votar, por Isaías, por Fernando, por todos los que no están, por nosotros y por las libertades. Tal vez ahora, carroñeros de ETA, brindaréis en algún zulo, pero sabed que la victoria será nuestra y vuestro destino la cárcel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario