sábado, 29 de enero de 2011

Yogur griego


Lleva tanto tiempo en las estanterías de los supermercados que el yogur griego ha dejado de convertirse en una novedad para ser una parte más del paisaje comercial con diferentes presentaciones: desnatado, desnatado edulcorado, con sabor a fresa, con trozos de fresa...
Confiesa uno la sorpresa que se llevó la primera vez que probó uno de esos lácteos. No sonaba a tabachaniotika. Uno encontró bajo esa etiqueta de yogur griego tradicional el recuerdo de la leche presa tradicional asturiana, aquella que nos hacían nuestras abuelas y que, con los peajes de la vida vamos perdiendo poco a poco. 
Sepa como sepa, bienvenido a nuestro comercio y que sea por mucho tiempo.

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