lunes, 25 de octubre de 2010

Perro en la playa


Playa de Peñamaría, agosto de 2010


El perro salía de entre las rocas. La marea había llevado el tronco seco hasta el límite de la playa, el lugar adecuado para esperar y permitir nuestros juegos de la imaginación.
Es curioso como los troncos secos alimentan el espíritu creativo de tantos. Es hermoso verlos en la playa, abandonados por la marea y trazarles una nueva vida, un nuevo sueño, como si fuese un poema abandonado esperando ser rescatado, un cuento deseando ser leído.



LinkWithin

Related Posts with Thumbnails