jueves, 4 de octubre de 2007

El hijodeputa, o malnacido, de Víctor Manuel

Las declaraciones de Martinez Camino sobre las ayudas del Estado a las madres solteras han indignado a Víctor Manuel, nuestro ídolo regional que hace un tiempo se mosqueó cuando le recordaron en algunos medios sus inicios en la farándula alabando con sus canciones a Franco. Víctor Manuel llama hijodeputa a Martínez Camino porque según él se opone a las ayudas a las madres solteras. Preguntado por la polémica, el cantante que cobra por sus actuaciones en Asturias más que fuera de la región a la que tanto ama (al menos eso dicen las malas lenguas), el cantante no rectificó ningún ápice y dijo que era un mal nacido, que es lo mismo que hijodeputa. Así, con un par.
Uno se enteró de la polémica por la prensa. Y, claro, le parece mal que no se ayude a las madres solteras, que se establezca una diferencia entre hijos. Además, en muchos casos, las familias monoparentales necesitan más ayuda que una familia con dos progenitores, en versión tradicional o en los nuevos matrimonios. Así que, picado por la curiosidad me acerqué a la web de la Conferencia Episcopal y escuché la grabación de la rueda de prensa. Manda carallo, porque, además, el tema en cuestión no sale hasta el final. Cuidado con el enlace, porque el volumen entra un poco alto, pinchar aquí.
En resumen, Martínez Camino, recuerda la doctrina de la Iglesia. Es decir, que se fomente la natalidad en los matrimonios tradicionales, pero si una madre soltera tiene un niño, también se le debe ayudar como se deben ayudar a todos los niños.
Y uno piensa que cualquiera, hasta Víctor Manuel, puede equivocarse y opinar en trazo grueso. Pero si insulta y descalifica sobre mentiras, debe excusarse en público, reconocer su error y tratar de recomponer la imagen dañada. De lo contrario, si calla como un cobarde, si se esconde en el silencio del miserable es un hijodeputa, o un malnacido.

De nuevo, en vanguardia

El pasado martes llegaba a los quioscos el nuevo diseño de La Vanguardia. Una gozada. Reducen su formato hasta el tabloide puro y depuran las líneas que, en 1989, realizó el maestro Milton Glaser. Aquel rediseño fue una auténtica revolución de un periódico que tuvo el valor de adaptarse a los nuevos tiempos antes que los tiempos terminasen por laminarlos. El nuevo diseño gana en poder visual y mejora las líneas claras que eran marca de la casa.
Ahora dan un paso adelante y también adaptan los contenidos que, suponen, esperan los lectores de hoy en día. Aseguran que el reto se lo han trabajado durante un año. El nuevo periódico implica una reorganización total del periódico, con más de 20 nombramientos de una tacada. Todo un reto del que salen bien parados. La Vanguardia se mantiene como un periódico de calidad, uno de los grandes diarios de España.
El lunes, el diario anunciaba el cambio con un extra donde explicaban y argumentaban todos los detalles, como la nueva tipografía, espacios... El martes, por ejemplo, Màrius Serra dedicaba su columna a exponer las razones que explican la nueva cabecera. Una delicia.

¡¡¡Aprobé el EGA, nivel 1!!!

Tengo una buena noticia y que justifica mi ausencia del Archipiélago durante los últimos días. Esta mañana me examine del nivel 1 de Estudios de Gijonesismo Avanzado, la titulación exigida por el Ilustrisímo Ayuntamiento de Gijón para admitir nuevos empadronamientos. Ha sido duro, pero aprobé.
Acudimos a la convocatoria cerca de medio millón de personas, 15.000 perros y trescientos gatos. Parece ser que las mascotas también deben examinarse. Ya entiendo porque Tila lleva un tiempo ladrando a todos los perros con pinta de carbayones. Chatines, os puede parecer mucha gente, pero es como hacen las cosas en Gijón.
El examen era teórico, el de las personas y oral ante un tribunal que daba miedo y que no podemos desvelar según las bases de la convocatoria. El de los animales, ni idea, porque Tila aún no lo ha hecho. Se podrá examinar cuando me pueda empadronar. No tiene sentido que la mascota pueda vivir en Gijón y el dueño no. La prueba tenía 5.000 preguntas. Aunque no era necesario responder a todo. Para aprobar es necesario sacar un par de ellas. Las cinco mil son necesarias si uno quiere renegar de su ciudad de origen y presumir de gijonés de toda la vida. En el caso de los carbayones mayores de edad, tienen que responder a 115.000 cuestiones, los menores tan sólo 15.000. Yo, que mantendré la triple nacionalidad (de Illas, de Avilés y de El Cerillero), tenía que responder a un diez.
Comprenderéis que, con tantas preguntas, no nos dejan comentar todas. Es más, nos obligan a firmar un compromiso de confidencialidad donde sólo estamos autorizados a divulgar una pregunta. X inició el examen después de leer mi expediente y me preguntó por las pruebas sobre la existencia de Dios. "La más evidente es Gijón". No dije nada más, pero creo que, a partir de ahí me gané el tribunal.
A eso de las doce de la mañana me confirmaban el resultado. ¡¡¡APROBADO!!! Con este nivel, puedo comprar y mudarme a El Cerillero. Con los siguientes niveles, tendré derecho a empadronarme, celebrar las victorias del Sporting y bailar la danza prima de Begoña.

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